Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
Con el propósito de dar respuesta a la demanda de las mujeres que desean cambiar su forma de vida, aprendiendo y desempeñando un empleo remunerado en Ksar el Kebir, solicitan la colaboración de Manos Unidas para ampliar su centro de formación con la puesta en funcionamiento de un nuevo taller de peluquería y estética dirigido a jóvenes urbanas y rurales. 8a5t
Ksar el Kebir (Alcazarquivir), ciudad ubicada al norte del reino de Marruecos cuenta con una población aproximada de 200.000 habitantes divididos entre el núcleo urbano y la zona rural. En el país, aunque se avanza hacia la integración de la mujer en la sociedad, los progresos son lentos y más si se trata del colectivo mujer-pobre-rural-analfabeta objeto de este proyecto.
En general, la mujer marroquí y en especial la de esta zona rural, tiene poco a todo lo que signifique cultura, desarrollo, libertad, y capacidad para poder ser libre desde su autonomía económica. Los jóvenes, en muchas ocasiones, sólo miran a Europa para ver cómo escapar y mejorar su modo de vida. Las jóvenes rurales, cuya preparación es muy precaria, como mucho han logrado asistir a la escuela primaria, sufren con mayor fuerza la problemática de trabajo no remunerado; ya que las posibilidades de trabajo de la zona rural son escasas.
Con el propósito de dar respuesta a la demanda de las mujeres que desean cambiar su forma de vida aprendiendo y desempeñando un empleo remunerado, nuestra contraparte las Hijas de la Caridad de Alcazarquivir cuya experiencia en la labor de género es de 23 años y con las que tenemos una experiencia previa, solicitan la colaboración de Manos Unidas para ampliar su centro de formación con la puesta en funcionamiento de un nuevo taller de peluquería y estética dirigido a jóvenes urbanas y rurales. Esta formación permitirá a las jóvenes establecerse como autónomas, trabajar como empleadas o realizar por su cuenta trabajos a domicilio (bodas, maquillaje, dibujos con henna etc.).
Nuestra contraparte aporta las prestaciones de una profesora de peluquería, dos profesoras de estética y una profesora de alfabetización, más el trabajo de asesoría técnica y de gestión de la asociación OPIDUM. Las beneficiarias abonarán, siempre que puedan, una pequeña cantidad con la que se pretende cubrir parte del mantenimiento.
Con la puesta en marcha del proyecto se habrá impulsado a la mujer para que alcance la plenitud de sus facultades, en igualdad de oportunidad con el hombre, educación, formación técnica y ocupacional, afirmación de gestión de su negocio, de su casa, influencia en su entorno etc. En definitiva, se sentirá valorada, importante y en consecuencia cambiará su percepción de "normalidad" ante las situaciones de violencia. La viabilidad y sostenibilidad del proyecto en años sucesivos está garantizada por el apoyo financiero de las Hijas de la Caridad, la ayuda en la gestión de la Asociación OPIDUM -verdaderos colaboradores-, el apoyo de otros marroquíes dispuestos a colaborar de manera gratuita: taxistas, voluntarios para buscar los materiales necesarios para el centro, peluqueras dispuestas a ofrecer su experiencia dejando que las futuras peluqueras y expertas en estética puedan hacer prácticas en sus propios centros.
El porcentaje del aporte local a este proyecto es del 33,77%.
Beneficiarios directos: 40. Beneficiarios indirectos: 340.
Para que Manos Unidas pueda llevar a cabo proyectos como este.
