Con tu donación garantizarás el derecho a la alimentación de más de 300 personas. 46g2v
¿Sabías que vivir en una zona montañosa y transfronteriza puede ser motivo suficiente para caer en una situación de extrema pobreza si ese lugar se encuentra en Haití, el país más pobre del hemisferio norte donde la situación es de total abandono?
Debido a la deforestación, la reducción de los cauces de los ríos, los terremotos y la situación socioeconómica, las familias de la Comunidad de Saltadère se ven abocadas a vivir en un estado de vulnerabilidad muy severo y no tienen garantizado un derecho tan básico como el de la alimentación. Por ello, los hombres se ven forzados a migrar para poder sustentar a sus familias y son las mujeres las que se quedan a cargo de los hijos, sin más medios de vida que aquellos que les brinde el escaso cultivo de la tierra.
La Comunidad de Saltadère necesita tu ayuda para que más de 300 personas puedan tener la oportunidad de subsistir en el lugar en que les tocó nacer, un lugar marcado por la sombra de la pobreza y el olvido.
El municipio de Cerca- la-Source (Departamento del Centro) es una de las zonas más vulnerables de Haití, el país más pobre del hemisferio norte, y padece severos niveles de pobreza extrema, según el mapa de pobreza del PNUD, por encontrarse en el área de montaña y en la zona transfronteriza, donde los servicios públicos no llegan. Las mujeres en esta zona presentan, sin embargo, mayor tendencia a permanecer organizadas. El entorno natural de Cerca-la-Source está erosionado por la desforestación progresiva de la agricultura migratoria de tala y quema de árboles y por la producción de leña para carbón vegetal.
Estos factores han contribuido a aumentar la pobreza de los suelos que, con bajos nutrientes, generan cosechas cada vez más reducidas en cantidad y calidad. A la pobreza del suelo hay que añadir la reducción de los cauces de los ríos y arroyos, generando problemas de al agua por parte de las comunidades afectadas, lo que se ve agravado por labores ilícitas de extracción de materiales para la construcción en otras localidades de la región transfronteriza.
La comunidad con la que se va a trabajar en el marco de este proyecto, Saltadère, se ubica en una zona remota de montaña en la misma línea de frontera y, por tanto, alejada de los centros políticos y económicos de toma de decisión. La situación es de total abandono y de dependencia del escaso comercio informal con comunidades dominicanas fronterizas.
La propuesta va a incidir directamente en el desarrollo de esta área transfronteriza mediante la ejecución de procesos de formación, producción y gestión para la producción y comercialización agrícola orientada a la seguridad alimentaria y al mercado binacional. El proyecto aborda el desarrollo de las capacidades de las agricultoras a través de una metodología donde la formación para poner en marcha cultivos y huertos se realiza en el mismo momento de la producción y se acompaña con la entrega de los equipos necesarios para su ejecución.
El presente proyecto, de 12 meses de duración, aprovecha el liderazgo femenino en la zona (muchas veces obligado por la marcha de los varones a la emigración) y prevé beneficiar directamente a 310 personas pertenecientes a 62 familias encabezadas por mujeres.
El socio local, INADEB, ha trabajado ya en esta zona fronteriza con Manos Unidas durante los últimos años, alternando sus iniciativas a uno y otro lado de la frontera. Manos Unidas ha tenido ocasión de visitar algunas de estas experiencias, constatándose su efectividad y su adecuación a la realidad de intervención.
