La sesión, guiada por el periodista Adrià Bas, impulsor del programa Solidaris de Catalunya Ràdio, se centró en la evolución tanto de actores como de mecanismos en el mundo de la cooperación al desarrollo. Desde la democracia, momento en el que en España empieza a haber un interés por la cooperación, la ayuda al desarrollo (AD) ha cambiado mucho, en cuanto a la visión que se tiene de ella como a los tipos de alianzas y acuerdos bilaterales entre países. 5fo6x
Pepa Martínez, directora de laFede.cat (Federació d’organitzacions catalanes per la justícia global), comenzó su ponencia citando a Nelson Mandela: “Erradicar la pobreza no es un acto de caridad sino de justicia”. Con estas palabras, Martínez explicó que España, al igual que Europa, forma parte del bloque capitalista mundial, y por tanto, la cooperación se desarrolla y ha de ser entendida dentro de este marco cultural, que la influye y moldea. Según la ponente, esta realidad se refleja en las ONGs y en la AD, en palabras de Martínez “mientras las vacas son gordas todos somos muy solidarios pero con la crisis…”.
En esta línea, Pepa Martínez explicó la dramática bajada en AD en los presupuestos tanto del Estado como de las CC.AA. El máximo al que se ha llegado en Cataluña fue en 2010, con un 0,43% PIB, alejado del 0,7% propuesto por Naciones Unidas. Esta idea supone que todos los estados deben comprometerse a destinar un 0,7% de su PIB anual a AD. Una realidad todavía lejana para España.
Para cerrar su exposición, Martínez hizo alusión a los retos que la cooperación se plantea actualmente. Principalmente un cambio de paradigma, “la caridad no es la solución, debemos hacer una nueva apuesta por la justicia global”. Así mismo, decía que sentirnos responsables no significa “ir a salvarles” sino trabajar para cambiar un sistema injusto y depredador.
Chema Caballero, cooperante de la ONG DYES, conocido por su trabajo con niños soldado en Sierra Leona, denunció durante su intervención no solo la bajada en AD sino que, además, parte de lo aprobado en los presupuestos para cooperación no llega a ejecutarse. Concretamente en 2014, el 19% de lo aprobado no llegó a ejecutarse, poniendo en peligro la actuación de numerosos proyectos.
Dentro de la OCD España es el 4 país que menos dinero destina a la cooperación, y mientras que la media Europea de AD se sitúa en un 0,51%, la Española destinó en 2016 el 0,21%. Siendo País Vasco la comunidad que más aporta con un 0,33% y Catalunya la séptima.
Además, Caballero explicó que en las últimas partidas de AD las ayudas no han ido a personas que lo necesitan ni a ONGs, sino que más del 80% de destina a acuerdos bilaterales.
Estos acuerdos se realizan sin criterios de fiscalidad justa, respeto a los Derechos Humanos, etc. Otra denúncia que Caballero trasladó fue la escasa cantidad de dinero de los acuerdos internacionales destinada a desarrollo social que a menudo, pasa, además, por paraísos fiscales.
Para finalizar, Chema Caballero hizo referencia al Plan de AD, aprobado tan solo por el PP, el cual, en palabras de Caballero “es un plan orientado a las empresas privadas”. Según Caballero, este plan deja claro que la prioridad para España es el control de fronteras. Por ello, invierten en países del norte de África, quienes cuidan de que los subsaharianos no lleguen a nuestro país. Un proceso que Caballero a descrito como externalización de fronteras.
Del mismo modo, denunciaba la privatización de la ayuda, siguiendo un modelo capitalista, en el cual la ayuda responde a intereses privados. Por ejemplo, existe un acuerdo bilateral con Mozambique debido a que el 80% de la pesca del país es española. O con Cabo Verde, cuyas empresas de transporte entre islas pertenecen a compañías españolas.
Otra consecuencia de la privatización de las ayudas es que las ONGs dependen de la financiación de la empresa privada, y por tanto existe un cierto grado de autocensura a la hora de denunciar la injusticia social por parte de las ONGs. Así, estamos en un modelo en el que “son las empresas privadas las que dirigen la cooperación”.
Caballero finalizaba su intervención haciendo referencia a la frase de Mandela y asegurando que actualmente “tal y como la tenemos concebida, la ayuda es caridad”.
Finalmente, realizó una pequeña intervención Arcadi Oliveres, histórico presidente de Justicia i Pau, asociación co- organizadora de este ciclo de conferencias, que lidera el movimiento que pide incluir la ayuda en los presupuestos tanto generales como por comunidades.
Leyre Merino
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